March 20, 2023, 12:36 p.m.
March 9, 2023, 1:32 p.m.
March 6, 2023, 1:41 p.m.
RESOLUCION POLÍTICA SOBRE ECOLOGÍA
Cada hombre, mujer, joven, niño o niña tienen derecho al disfrute de un medio ambiente saludable Yseguro. Aun siendo conscientes de que ha habido avances en esta materia y ha aumentado la
conciencia en el cuidado de la naturaleza, es difícil reconocer de forma exhaustiva el reconocimiento de este derecho de las personas en ninguna norma fundamental.
Ante una degradación de los ecosistemas que hace todavía más dura la vida cotidiana de los pobres se ha de comenzar a vincular los derechos humanos con la protección ambiental; el ideal de justicia se debe de ampliar al de la ecojusticia.
La ecología debe de estar presente en la política para conseguir transformar de forma radical la
relación entre los hombres y la Tierra. Solo teniendo en cuenta la ecología en el debate político se
crearan alternativas para hacer entender y sobre todo comprender que todo lo que pertenece a
nuestro entorno natural nos pertenece a todos y que no puede estar en manos privadas.
El derecho al disfrute de un entorno natural saludable debe de ser reconocido y recogido en nuestra constitución en el capítulo de derechos fundamentales dado que es el estado al que corresponde reconocer este derecho y sobre todo garantizarlo.
Hay que abordar las consecuencias que ha ocasionado el daño que hemos producido al planeta por la sobre explotación al que lo hemos sometido, consumiendo recursos naturales de forma desaforada para alimentar a un sistema de producción irracional y que se evidencia en el cambio climático del que ya hemos comenzado a sufrir sus efectos.
Por este motivo y teniendo el convencimiento de que hay que revertir nuestra relación con el medio ambiente, debemos de proponernos como punto de partida, el cumplimiento de los acuerdos adoptados en la Conferencia de las Naciones Unidas celebrada en París en al año 2015. La reducción de emisiones de Co2 y gases contaminantes deben de estar debidamente regladas mediante leyes que garanticen el estricto cumplimiento tanto por la industria como por la ciudadanía. También debe de regularse la explotación de los recursos naturales, eliminando métodos como el fracking o cualquier otro que vaya en contra de la lógica ecologista.
Apostamos por el cambio de modelo energético. Debemos apostar de forma decidida por el abandono del uso de la energía fósil e iniciar el cambio paulatino pero decidido hacia el consumo de energías limpias y renovables. Este cambio de modelo, activaría un sector de la economía en la que los jóvenes de nuestro país serian francamente beneficiados por la demanda que originaría en el mercado laboral.No debemos de olvidar que invertir en esta forma de obtener y consumir la energía significaría potenciar los presupuestos en I + D + i, tan denostados por gobiernos anteriores y que tanto sufrimiento han traído a los y las más jóvenes de este país.
La puesta en marcha de este modelo energético podría ser el punto de partida para cambiar de forma radical los costes y el acceso democrático para todos y todas las ciudadanas, poniendo este recurso al servicio de ellos y ellas, no siendo utilizado como un valor mercantil especulativo en manos de los monopolios energéticos que actualmente controlan el mercado.
Este cambio de modelo energético debe de contar con las ayudas estatales necesarias, convirtiéndolo en un servicio público y por lo tanto regulado como tal, tanto en lo que respecta en la producción como en la distribución.
Debemos de tener en cuenta la reducción del propio consumo energético. Eléctrico principalmente.
Para ello estimamos que, debe contemplarse una importante y rotunda revisión de las normas
actuales, (Código Técnico de Edificación (CTE, etc) para que influyan sin contemplaciones en
cualquier tipo de construcción/edificación que genere un consumo energético destinado a
calefacción/climatización, iluminación u otros.
Consideramos de vital importancia que se apueste por enmendar los parámetros actuales exigibles y apostar por otros mucho más restrictivos que aporten, nos solo a las edificaciones residenciales sino también a las administrativas, hospitalarias, industriales, comerciales, etc., sean públicas o privadas, unos ambientes de confort que basados en nuevas técnicas constructivas, consigan una extraordinaria merma en el consumo energético, bien fósil, bien alternativo y, en consecuencia fomentar una economía sostenible y lo más inocua posible con nuestro medio ambiente.
Entendemos que rebajar de forma sustancial los consumos energéticos, sin despreciar nuestro
bienestar, es una forma, no solo de evitar el consumismo sino de abandonar las políticas, que dictadas por el gran capital, nos incitan al derroche.
A su vez, estimamos que al necesitar menos materia prima para la producción de energía eléctrica, serian aquellas de importación, innecesarias, las primeras en desapareceré de nuestra economía y a la par, hasta llegar a un espacio donde imperen las energías alternativas, apoyarnos transitoriamente en nuestros recursos autóctonos, como son los yacimientos carboníferos. Eso sí, en modo subterráneo y bajo exhaustivos controles que hagan respetar nuestro medio ambiente y otros nichos de trabajo (Ganadería, forestales, hídricas, agrarias, turísticas,…)
Creemos que debemos tener una posición firme y solidaria con las diferentes Federaciones
productoras de nuestro Estado y no caer en la farsa que demoniza al carbón. Razón por la que
gozaremos de astucia y claramente diferenciaremos el carbón de su combustión, ya que es esta últimala causa de las nocivas emisiones atmosféricas.
Consecuentemente, estaremos en disposición de aclarar y divulgar que es sobre el monopolio
eléctrico (gran capital) donde reside la solución a los problemas de contaminación existentes ya que, al ser los grandes propietarios de las térmicas y ciclos combinados existentes en nuestro estado, le corresponde también a ellos, modificar cuantos sistemas y formas necesiten a fin de producir una energía limpia dependiente del carbón.
A su vez, también debemos ser lúcidos y saber que con el actual sistema de producción eléctrica
basado en el carbón autóctono, constantemente se está embaucando a la sociedad ya que pretenden impedirnos clarificar que se están socializando las pérdidas que supone su propia extracción, mientras que en contraposición, se privatizan los beneficios generados, no solo en la producción eléctrica, sino también en su distribución (Red Eléctrica Española. REE). Dicho de otro modo, no es cierto que sea deficitaria la energía eléctrica de origen carbonífero autóctono de nuestro Estado, ya que en la cuenta de resultados económicos, han de tenerse en cuenta a la vez, tanto a extracción como la producción, transporte y comercialización.
Y decimos que hemos de estar despiertos porque con mentiras basadas en la carestía que supone la extracción del carbón autóctono, se ha convertido en el puerto del Musel (Gijón) en el mayor
“productor” de carbón del Estado. Eso sí, carbón no exento de combustión contaminante y sobre todo cargado de sangre en su minería. Pero un carbón que perfectamente satisface los anhelos
despiadados de todas aquellas personas que medran alrededor del actual sistema energético español. (En el puerto del Musel en Gijón, en 2016 la entrada de carbón ha sido de 675.044 tm por las 1.190.293 tm del 2017; es decir un incremento del 76.3%). Sin embargo, la producción estatal en 2016 ascendió a 1,76 millones de toneladas ha sido un 42,70% menor que la del 2045 que ascendió a 3,04 millones de toneladas.
Podríamos concluir diciendo que las cifras expuestas, en comparación con los grandes productores y consumidores de carbón a nivel mundial, son residuales. Y en consonancia, afirmaremos que las toneladas contaminantes enviadas a la atmósfera, también lo son. Luego, no es cierto que grandísimo problema de contaminación actual sea el carbón, sino la codicia del gran capital que apátrida, se defiende desde las puertas giratorias establecidas e instauradas en los partidos defensores del régimen del 78.
Llegados a este punto, entendemos y estamos firmemente convencidos que debemos luchar por la
nacionalización de la energía en cualquiera de sus forma y, diseñar un Plan Energético Estatal cuyo objetivo sea conseguir un sistema Cero en emisiones nocivas para el Medio Ambiente pero que a su vez, en el proceso transitorio que a él nos lleve, recurrir a un Mix energético donde nuestro carbón tenga cabida donde sea suplida la actual industria carbonífera por otras que mantengan y aseguren la supervivencia de los pueblos y comarcas afectadas y donde el carbón forma parte de la reserva energética Estatal.
Por otra parte y como partido que tiene entre sus referencias la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en su artículo 25 dice: “Todas las personas tienen derecho a una buena nutrición como condición sine qua non para un desarrollo pleno, físico y mental”. Es por esto por lo que reconocemos el derecho a la alimentación como un derecho básico de las personas. Además de ello, este derecho hay que ampliarlo a cuestiones de calidad alimentaria y que los métodos de producción sean respetables con el cuidado del medio ambiente.
Las políticas capitalistas, basadas en economías productivistas y de crecimiento continuo, han
causado graves desequilibrios e injusticias en torno a esto. Por ello debemos de practicar modelos
económicos que no se basen en el productivismo y que conlleven un orden social igualitario, solidarioy democrático.
Hay que reconocer el servicio que prestan los hombres y mujeres que se dedican a alimentarnos, por este motivo, cambios de legislación sobre formas de comercialización de los productos agrarios son necesarias para que reviertan las plusvalías en los que realmente las merecen y que son los y las agricultoras y los consumidores.
También hay que apostar por la agroecología, fomentar el asociacionismo, regular el comercio de
proximidad o de Km 0 y conectar a la universidad, movimientos ecologistas y consumidores con el
medio rural y las personas que lo trabajan. Esta apuesta debe de ser debidamente normalizada
mediante la implantación de legislación que la promueva y debidamente financiada para su puesta en marcha.
El reciclaje como parte importante de la ecología, debe de ser tenido en cuenta como parte
fundamental del cuidado de nuestro entorno por el grave deterioro que produce a nuestra tierra, ríos y mares. Criterios como la prevención, la reutilización, el reciclado la valorización y la eliminación quedan excluidos en los planes de recogida de residuos, alejándose de las experiencias puestas en práctica en otros países y que son mucho más sostenibles y más justas socialmente, y que generan muchos puestos de trabajo creados por la economía social.
Actualmente los planes de recogida de residuos sólidos se centran en la recogida indiscriminada de basura, dejando de lado el reciclaje y compostaje y los basan en el transporte de la basura, con el consiguiente consumo energético y el encarecimiento del servicio.
Es evidente que quien pierde con la implantación de estos planes de residuos es el medio ambiente, la economía social, los ciudadanos y gana la empresa privada que gestiona el servicio que han privatizado.
Por ello reivindicamos que la gestión del tratamiento de residuos sea pública y no esté en manos de la empresa privada. Crear pequeñas plantas de compostaje públicas que traten los residuos. Impulsar centros de reutilización locales y comarcales que sean gestionados por cooperativas y empresas de economía social.
Por este motivo se debe de redactar la normativa necesaria para reducir el elevado nivel de residuos que desechamos y e implantar leyes en la que se regule la responsabilidad de los productores de estos residuos, creando herramientas fiscales que financien su eliminación.
Al igual que hay que dotar de instrumentos económicos coercitivos para reducir el porcentaje de
residuos que generamos, también hay que fomentar entre los consumidores unas nuevas formas de consumir. Para ello, los ayuntamientos serían de vital importancia para ponerlas en vigor, mediante la bonificación de las tasas de recogida de residuos sólidos y poniendo en marcha campañas de concienciación de esta problemática medioambiental.
En la cuestión referente a la defensa del territorio y el medio ambiente, la mujer debe de ser participe y no remitirse solo al ámbito doméstico. Son muchas las causas donde la defensa del medio ambiente, la lucha como consumidoras y un largo etcétera hacen que ecología y feminismo vayan de la mano. Es importante esta visión de género y entendemos que debe de ser considerada como fundamental en cualquier debate político en defensa de la naturaleza. Nadie mejor que ellas, pueden aportar la sensibilidad y la conciencia de que el deterioro del medio ambiente va unido al deterioro del ser humano.
Libertad, igualdad y sostenibilidad debe de ser el lema que debemos adoptar en esta materia.
July 29, 2021, noon
May 7, 2020, 10:23 a.m.
May 23, 2019, 6:44 p.m.